Bushnell Forge 10x42

El prismático probado junto a parte de su dotación de accesorios: bolso de transporte con correa, bolsa guardapolvo de tela, paño de limpieza de lentes, tapas y correa acolchada para el cuello.

Forge es el nombre de la gama de óptica de mayores prestaciones de Bushnell. Engloba visores y telescopios, que ya conocía, así como también prismáticos que hasta la fecha nunca había tenido la oportunidad de probar. Por fin, hace unos días recibí procedente de Borchers, S. A., que es la empresa que distribuye Bushnell, un ejemplar 10x42, el formato más popular y más utilizado para recechar. También está disponible en 8x42, más útil en montería porque su campo de visión es mayor —142 frente a 113 m— y en 15x56, cuya principal aplicación es la observación con trípode a grandes distancias.

Forge 10x42

Se trata de un binocular con un diseño muy cuidado que está impecablemente acabado. Posee rueda de enfoque central antideslizante, oculares con conchas giratorias que se pueden situar en 4 posiciones —baja, intermedia, media y alta— y cuerpo con doble puente que está forrado de goma antideslizante de color marrón o bronce oscuro combinado con zonas de color negro que le proporcionan un aspecto muy original e inconfundible y en mi opinión, también muy atractivo y adecuado para realizar observaciones en todo tipo de escenarios. Bushnell lo denomina color terrain —color tierra— y lo utiliza en todos los aparatos ópticos de la gama Forge, es decir, como hemos apuntado también en los telescopios y visores Forge, si bien los visores también se fabrican en color negro.

Además de con correa para el cuello, los binoculares se suministran con arnés Bushnell Premium, muy útil para realizar observaciones prolongadas.

Los prismáticos tienen en común con los visores y telescopios que están equipados con lentes ED —iniciales de Dispersión Extrabaja— fabricadas con vidrio ED Prime, que es el de mayor calidad que utiliza Bushnell porque, según la prestigiosa empresa especializada en óptica, «ofrece un color, resolución y contraste sorprendentes, incluso en condiciones de poca luz». Lo dice Bushnell, lo digo yo y supongo que también lo diría cualquier persona que pudiera comparar cómo se ven los objetos con un binocular 10x42 antiguo con otro moderno con lentes ED. No hay color y nunca mejor dicho. Es increíble lo que ha avanzado la óptica.

La foto permite apreciar el diseño antideslizante del cuerpo de los prismáticos, así como su doble puente.

Además, poseen prismas Bak4 con corrección de fase PC-3 y recubrimiento dieléctrico que mejoran la resolución y el contraste y producen una alta reflectividad, colores fieles, alta resolucio?n e imágenes brillantes y nítidas, incluso en las horas crepusculares, y permiten una alta transmisión de la luz —que cifra el fabricante en el 92 por ciento—.

La parte posterior de los tubos poseen rebajes que permiten apoyar con comodidad los pulgares. Los Forge son muy ergonómicos.

Como todos los productos de esta gama, poseen una construcción robusta y a prueba de agua —sumergibles hasta 91,44 cm de profundidad durante 30 minutos— y los objetivos poseen una protección exclusiva de Bushnell, denominada Exo Barrier, que repele el agua, la grasa y protege contra los arañazos, lo que es especialmente útil en un binocular de caza.

Debajo del puente inferior posee la conexión a trípode. Está protegida por un embellecedor estriado y adornado con el logo de Bushnell que se retira desenroscándolo. A los Forge no le falta detalle.

Cabe añadir que en 10x42 pesan 880 gramos, miden 17 cm de longitud y que poseen mando de corrección dióptrica debajo del ocular derecho, así como conexión para trípode en debajo del puente inferior.

Tanto la rueda de enfoque, como la de corrección dióptrica y los oculares giratorios poseen estrías antideslizantes y se pueden manipular con suavidad y precisión, incluso con guantes o con las manos húmedas.

Y también que se entregan perfectamente equipados: con funda de transporte rígida con correa, tapas para oculares, tapas para objetivos —que quedan enganchadas del cuerpo para que no se pierdan—, arne?s Premium, correa para el cuello, bolsa-guardapolvo de tela y pan?o para las lentes.

Las tapas de los objetivos, aunque se pueden desmontar, quedan enganchadas de los oculares para que no se pierdan.

Pruebas

El Forge 10x42 no es un binocular pequeño ni tampoco ligero, pero cuando lo tienes colgado del cuello de la correa y cuando lo usas no te parece grande ni pesado porque es muy ergonómico y puedes asirlo cómodamente y de forma estable gracias al diseño de doble puente del cuerpo —que te obliga a colocar las manos justo donde hay que asirlo— y también a que los tubos poseen apoyo para los pulgares.

Con los Forge 10x42 se pueden realizar observaciones muy estables y rápidas debido al ergonómico diseño de su cuerpo y a su suave y precisa rueda de enfoque.

Tampoco es un prismático para cazar de noche. No lo es ni este modelo ni ningún otro con objetivos de 42 mm, pues de noche hay que usar binoculares de buena calidad con objetivos de 56 mm, pero desde el amanecer y hasta el anochecer sus prismas Bak4 junto con las lentes ED multi-tratadas reproducen imágenes luminosas de primera calidad que se divisan siempre nítidas y del color real que tienen los objetos observados.

Probando la calidad de la imagen, especialmente la nitidez y fidelidad del color en un campo de flores: se divisaban tal como eran a simple vista, solo que 10 veces más cerca.

Tampoco es un binocular caro, pues solo cuesta 541 euros, pero por este precio yo no conozco ningún otro binocular del mercado que tenga una calidad similar y además esté tan cuidadosamente acabado y tan bien equipado. El diseño de doble puente, el enganche para el adaptador a trípode, una rueda de enfoque y conchas giratorias tan precisas, los apoyos para los pulgares, etc. No le falta ningún detalle ya que está equipado con el arnés para la espalda y el guardapolvo de tela, además de con todos los demás accesorios que normalmente se proporcionan con los prismáticos de otras marcas.

¿A que se nota que me gusta el Forge? Me encanta.