El recuerdo del lance quedará grabado en nuestra memoria pero el disponer de una buena fotografía nos hará transportarnos al instante en que se hizo y además nos servirá para compartir nuestra experiencia con los amigos.
RESPETO
Esta es la parte más importante de este artículo, por desgracia nuestra afición siempre está en tela de juicio. Y en nuestra mano está el intentar ofrecer una imagen respetuosa de nuestra actividad.
Independientemente de la opinión de los demás, debemos un respeto al animal, es por eso que hay que evitar imágenes ensangrentadas o que ofrezcan una imagen humillante de la presa.
Sinceramente odio las fotos de los planteles de las monterías, las fotos en las que los cazadores se sientan encima de sus piezas y otras muchas fotos que se encuentran por internet y que no nos benefician nada.
Es normal que usemos puntas de gran diámetro de corte que produzcan grandes heridas con el fin de conseguir el mayor rastro de sangre posible, pero eso no implica que nuestras fotos muestren esa imagen.
Con unos pañuelos, con una servilleta o incluso con tierra o hierba debemos limpiar la sangre que pueda tener el animal por el cuerpo.
No está de más llevar una botella de agua que con la ayuda de un trapo nos servirá para limpiar cualquier resto de sangre del animal.
También debemos limpiar el suelo o elegir una ubicación donde no haya sangre.
Para la foto buscaremos el lado donde la herida sea menos visible o donde el animal este menos manchado de sangre… Un buen truco es tapar con el arco la herida.
Muchas veces también es necesario esconder o cortar la lengua de nuestra captura para que ésta muestre una imagen más noble.
Esta es una de mis fotos preferidas, al colocar el macho montes en una roca con la montaña de fondo, la foto trasmite que se trata de una cacería de rececho en montaña. Una persona que no conozca la especie viendo esta fotografía se podría hacer una idea de cómo o en qué tipo de terreno se ha efectuado la cacería.
COMPOSICIÓN
En este apartado os daré algunos consejos de como podemos colocar la pieza y como colocarnos nosotros para obtener una elegante composición y una foto que trasmita.
Suele quedar bien esconder las piernas del animal debajo de su cuerpo simulando así una posición más natural.
En cuanto a nuestra ubicación, mucha gente recomienda que el cazador se aleje de la pieza para centrar la importancia de la imagen en el trofeo, a mi personalmente no me gusta esta opción, el trofeo es el que es y a mi me gusta acercarme al animal para cuando vea la foto recordarlo conforme era realmente. Además de este modo conseguiremos un mejor enfoque al estar más o menos en el mismo plano que el animal.
A no ser que sea necesario no me gustan los picados, prefiero tomar la foto con el objetivo a la altura de los ojos del cazador o incluso más bajo.
Para conseguir un mejor encuadre es mejor que el cazador no se quede de pie y se siente o agache para la foto.
Esta foto de Jaume habla por sí sola, no es necesario que nos cuente como ha sido la cacería porque ya lo sabemos. El incluir el blind o puesto en la fotografía aporta información a la foto. Seguro que esta foto, con el paso del tiempo, le sirve a Jaume para recordar su lance y el entorno donde ocurrió.
Es importante también elegir el fondo adecuado para nuestra fotografía, hay que evitar zonas que no sean naturales, muchas veces ves fotos hechas en la casa del coto o al lado del coche, etc.
Busquemos un fondo que forme parte de la historia que queremos trasmitir, para comprender mejor esto os pongo un par de fotos.
En condiciones normales para mis fotografías intentó alejarme lo máximo posible del fondo para obtener fotografías con poca profundidad de campo, para los no iniciados en fotografía profundidad de campo hace referencia a la zona de la fotografía que esta enfocada. Los parámetros que nos permiten jugar con la profundidad de campo son tres:
1- distancia entre los objetos a fotografiar
2- longitud de nuestra lente (zoom)
3- apertura de diafragma (a una apertura más abierta menor profundidad de campo)
De todos modos os invito a probar diferentes posiciones y composiciones. Para obtener una bonita fotografía no es necesaria la típica foto del animal de lado y el cazador centrado detrás. Tampoco es necesario mirar a la cámara, para muestra comparto con vosotros esta bonita imagen de Toni con un ciervo selectivo.
Piensa antes de hacer la foto cual es la historia que quieres contar, una foto puede aportar mucha información como esta que realizamos recientemente en México. La caceria del elk fue el punto final de nuestro viaje, quizá el animal más emblemático de los que cazamos y su captura cerraba uno de nuestros documentales… Por eso esta foto aparté de mostrar el elk, muestra el compañerismo, la alegría e incluso la culminación de nuestro objetivó.
Como vemos en esta fotografía el fondo aparece desenfocado ofreciendo un bonito fondo a la fotografía pero sin restarle protagonismo a lo realmente importante.
LA LUZ
Por desgracia es quien manda en las fotografías y es algo que no siempre podemos manipular.
La caza del jabalí en espera nos obliga muchas veces a hacer nuestras fotos de noche y esto es un problema.
El enfoque es complicado, elegir una composición adecuada para la fotografía también y además nos obliga a hacer uso del flash.
Aún así es posible conseguir alguna foto decente.
Aunque lo ideal si es posible es retrasar la foto al día siguiente para hacerla con luz, nuestros resultados serán mucho mejores… Eso sí, que nunca se estropee la carne por una fotografía.
Animaos y si tenéis algún truco o consejo añadir un comentario… entre todos tenemos que conseguir la foto perfecta. :-)
En una próxima entrega pondremos la segunda parte de este artículo con unos consejos prácticos sobre la fotografía de grupos, algo muy importante cuando se caza con amigos.
