Accidentes en Álava: en vías de solución

Álava, por su orografía, cobija una importante población al alza de jabalíes, ciervos y corzos. Sin embargo, esto que en principio debería ser un motivo de satisfacción para cualquier amante de la Naturaleza, está siendo un grave problema para los conductores —accidentes de circulación— e injustamente para los cazadores al hacerles la judicatura responsables de los daños derivados de los mismos.


Vamos, un disparate de tal magnitud que se da solo en España, ¿a quién se le ocurre exigir responsabilidades a los únicos que están haciendo con la práctica de la caza que esto no vaya a mayores? ¿Acaso la policía es responsable de los daños que ocasionan los chorizos? De hecho, si no se cazara en dos o tres años los jabalíes camparían por sus rehales en las campas de Mendizorroza. No en vano Álava tiene 370 pueblos, soporta una media anual de 260 accidentes con animales silvestres en 202 kilómetros de carreteras comarcales y 534 de locales, muchas de ellas enquistadas en el monte. La defensa de una caza racional sustenta en Álava uno de los pilares más conservacionistas y realistas, la supresión de los animales que no puede admitir determinado medio. Afortunadamente una vez más han tenido que ser los cazadores, y en especial sus sociedades, de la mano de las Federaciones Territoriales quienes, arropados por Adecap, miembro importante de la Oficina Nacional de la Caza, ha cogido el testigo para solucionar esta injusticia. Y lo ha hecho con efectividad logrando después de muchas reuniones con el Ministerio Rural y Marino que incluyan la solución a esta y otras reivindicaciones históricas en el borrador de la nueva Ley de Montes. Este documento, con muchísimas posibilidades de salir en breve adelante, exime al titular del acotado de toda responsabilidad, excepto en el caso poco probable de que el siniestro sea consecuencia directa de una acción de caza colectiva llevada a cabo el mismo día, algo así como que una pieza cruce la carretera seguida de perros. En el caso de daños a la agricultura, el titular del coto sería responsable solamente si hay un incumplimiento manifiesto de las medidas previstas en el plan técnico de caza (no haber dado el número de batidas que establece el mismo). En cuanto a la prórroga de la paloma torcaz, el borrador contempla una mayor coordinación o armonización de las órdenes de veda, especialmente de las migradoras. Quiere esto decir que si hay voluntad política, que seguro que la habrá, no en vano la torcaz están en clara progresión y la competencia es de las distintas comunidades autónomas, podría prorrogarse el cierre de la torcaz como mínimo hasta finales de febrero o primeros de marzo en el mejor de los casos, como en el sur peninsular. Seguro que la Federación Alavesa como la Bizkaina y Gipuzkoana solicitarán la prórroga, faltaría más, así de fácil y así de justo.
Comparte este artículo

Publicidad