Accidentes

Año nuevo, vida nueva. A caballo entre un año y otro, y en esta ocasión más que nunca, todos hacemos buenos propósitos de cambio, de empezar esa dieta milagrosa que nos rebaje unos kilos, visitar de vez en cuando un gimnasio y, en el caso de los cazadores, salir más al campo a disfrutar de nuestra afición, que además nos viene muy bien para paliar los excesos en comida, bebida, sedentarismo y muchas horas en el trabajo.


Pero al final, suele quedarse en eso, en buenas intenciones que se abandonan a las pocas semanas. Algo parecido ocurre en este mundo cinegético, que también cada cierto tiempo reaviva sus luchas internas, sus enfrentamientos, los protagonismos y las descalificaciones. Pero esto es así y así hay que tomárselo. Cuando vivimos vientos de cambio en la política nacional, es buen momento para que los cazadores nos plantemos de una vez por todas y vayamos, a través de nuestros legítimos representantes, a solucionar de forma definitiva todos los problemas que venimos arrastrando y a los que se van poniendo paños calientes. Es hora de cambiar, es hora de mejorar. La caza es necesaria en esta sociedad accionada por la crisis económica. Es un sector que también se está viendo seriamente afectado, pero que con cariño, con un pequeño impulso, puede suponer una solución para áreas cada vez más deprimidas, para crear puestos de trabajo, para volver a ilusionarnos en un objetivo común. Nos sobran salvadores y nos falta gente que quiera trabajar, sin protagonismos, por la caza. Desde Federcaza Io tenemos muy claro. Vamos a afianzarnos en el puesto de líderes del sector de las publicaciones de caza, pero sin dormimos en los laureles, por lo que en Grupo V les preparamos muchas novedades, que esperamos les gusten. Sólo me resta desearles buena caza en este remate de la temporada de menor y mayor y que en el nuevo año, en ese 2012 que ya está aquí, se cumplan todas sus ilusiones.
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