El Ministerio de Turismo decide no renovar el contrato de gestión de la Reserva Nacional Niassa

La Reserva Nacional de Niassa, situada en el norte de Mozambique y con una superficie de 42.000 km2, es una de las áreas protegidas más grandes de África. En el plan de gestión 2007-2012 se dividió en diecisiete unidades de gestión: nueve bloques de caza, seis bloques para turismo fotográfico y dos zonas de alto valor en biodiversidad (Medcula y las Montañas Joa).


La mayor parte de la reserva son bosques de miombo intercalados con dambos húmedos estacionalmente y áreas secas de matorral de sabana. El paisaje está salpicado con monolitos de granito o inselbergs. La presencia de nueve distritos, tres ciudades, y más de cuarenta pueblos que albergan a más de 35.000 personas dentro de la reserva, introduce una dimensión particular de manejo para esta área. El área es hogar de la mayor concentración de fauna salvaje en Mozambique y uno de los mayores ecosistemas protegidos de bosques de miombos del mundo. Su naturaleza virgen acoge a una variada y rica colección de vida silvestre: 15.000 elefantes, 9.000 antílopes sable, y varios miles de búfalos del Cabo, hartebeest de Lichtenstein, elands y cebras. Unos 400 perros salvajes africanos en peligro de extinción viven en la reserva, que también alberga una significativa población de leones. Numerosos estudios sobre biodiversidad realizados desde el año 2000 confirman que las características geológicas únicas de Niassa acogen elementos remanentes de los cinturones forestales del este de África Oriental, lugares críticos de endemismos. En 1998, un grupo de inversores creó una empresa privada, Investimentos Niassa Ltd, formando sociedad con el gobierno y estableciendo la Sociedade de Gestao e Desenvolvimento da Reserva do Niassa (SGDRN) Moçambique en 2002. A la sociedad formada se le adjudicaron los derechos exclusivos para la gestión y desarrollo de la Reserva de Niassa en términos de un contrato de 10 años. En 1999, Flora y Fauna Internacional (FFI) fue invitada por dicha sociedad para ayudar en el desarrollo de una estrategia global para la conservación y gestión de la Reserva de Niassa, y en el año 2000 formaron una alianza estratégica para proporcionar asistencia técnica y financiera. El apoyo de FFI continuó durante los siguientes 10 años y jugó un papel decisivo en la aplicación del plan de gestión. Gestionar las expectativas de las comunidades en un entorno en donde el gobierno local persigue una agenda de desarrollo rural dentro de un área de conservación fue el mayor desafio. SGDRN también desarrolló las mejores prácticas para los sistemas de gestión de todas sus operaciones de caza de una manera sostenible estableciendo el modelo a seguir para el resto del país. También invirtió fuertemente en la realización de censos aéreos bianuales, y apoyó el proyecto independiente Niassa Carnivore Project. En reconocimiento a sus logros en la gestión cinegética sostenible, SGDRN fue honrada en 2008 (junto con las comunidades del corredor Selous-Niassa en Tanzania) con el prestigioso "Premio Markhor por Desempeño Sobresaliente en Conservación" por el Consejo Internacional para la Conservación de la Caza y la Fauna Silvestre (CIC), un tributo al compromiso del SGDRN y del gobierno mozambiqueño por el desarrollo sostenible de las áreas protegidas. Sin embargo, con el paso del tiempo la percepción de la forma en que la Reserva de Niassa debe gestionarse en el futuro ha cambiado. El Gobierno ha madurado desde el inicio el "Modelo de Niassa" y ha adquirido experiencia con otros modelos implementados en asociación con el sector privado en el país, en particular los desarrollados por la Fundación Carr para Gorongosa y el desarrollo del programa transfronterizo en la provincia de Limpopo. Desde el principio estaba claro que el Gobierno ya no estaba dispuestos a dar cabida a un acuerdo donde todas las responsabilidades de toma de decisiones fueran delegadas en una sociedad como SGDRN. Por el contrario SGDRN y los donantes que le apoyan no estaban dispuestos a negociar un acuerdo de "cogestión" en el que las responsabilidades de toma de decisiones no estaban claras. Se llevaron a cabo largas negociaciones sin resolver el impasse. Al final, el contrato expiró el 12 de septiembre de 2012, poniendo fin a las responsabilidades de gestión de SGDRN y a una era que había sido testigo de un nuevo y audaz enfoque a la gestión de un área de conservación compleja. Mientras tanto, el Ministerio de Turismo ha estado negociando por separado con la Wildlife Conservation Society (WCS), que ha aceptado entrar en "cogestión". Los detalles de este acuerdo no estaban disponibles en el momento en que Gerhard R. Damm (de African Indaba) escribió este artículo, pero entendía que el acuerdo es similar al que vige en el Parque Nacional de Gorongosa. La Reserva Nacional Niassa es extremadamente difícil en varios frentes: las dinámicas cambian continuamente y se enfrenta a importantes amenazas de minería ilegal, tala ilegal, y un marcado aumento de la caza furtiva de marfil. El acceso a la reserva ha mejorado considerablemente en los últimos 10 años, especialmente con la apertura del Puente de la Libertad que une el norte de Mozambique con el sur de Tanzania. Esto, junto con la expansión de la población humana, introduce nuevas dimensiones en la forma en que la reserva se gestione en el futuro.
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