El encuentro tuvo lugar de forma distendida durante más de una hora, tiempo en el que la ACCCM de Galicia pudo poner en conocimiento del Conselleiro temas muy diversos que atañen a la gestión de las poblaciones de caza mayor.
Se habló de la disconformidad que la ACCCM de Galicia manifiesta hacia las batidas por daños fuera de temporada, por considerarlas lesivas a la dinámica de las poblaciones y contraproducentes para los agricultores gallegos.
Se pusieron de manifiesto otras actuaciones técnicamente más beneficiosas y capaces de minimizar los daños que sufren, cada vez con mayor rigor, los agricultores galaicos; en gran parte por estarse usando los actuales métodos, ya demostrados como ineficaces en otras partes de Europa.
Se habló de la futura
Lei de Caza Galega, y de las alegaciones presentadas por esta asociación. Hubo tiempo para plasmar el desagrado que la Orden de Vedas ha provocado en los cazadores de mayor de Galicia, al no haberse plasmado en el DOGA con fidelidad, los acuerdos habidos en el Comité Galego de Caza. Se trataron también cuestiones sobre los daños en las vías públicas. Propuso esta asociación que los proyectos de nuevas carreteras y autovías de la comunidad gallega cuenten con informes de las asociaciones cinegéticas especializadas para, de esta forma, ubicar la colocación de los pasos de fauna con mayor efectividad. Los cazadores aportarían sus conocimientos en aras de una mayor y mejor seguridad vial.
Finalmente también se informó a D. Agustín Hernández sobre el parón técnico que atraviesa la
Xunta Galega de Homologación de Trofeos de Caza Maior, de la cual los representantes de la ACCCM de Galicia, presentes en la reunión, son vocales a propuesta de la FGC. El Conselleiro coincidió en el papel interesante que la homologación de trofeos, en Galicia, puede aportar de cara al interés científico y a una mayor dinamización económica del rural. Es conocido que la caza mayor, a día de hoy, puede aportar un plus de calidad al turismo de interior; además de la dinamización que ya representa en estos momentos la propia caza social, que en Galicia mueve ya cifras cercanas a los 97 millones de Euros.
