Esta prueba servía también como selectiva de cara al Campeonato del Mundo de la modalidad, que se disputará en Eslovaquia. El coto de Fuensalida es ideal para este tipo de pruebas, ya que se entremezclan rastrojos y viñas. Además, la existencia de una densidad de perdiz roja más que suficiente ayudó a que el concurso se desarrollara adecuadamente.
La sorpresa de este campeonato saltó en razas continentales, donde Luis Fuentes tuvo que medir a dos de los perros que conducía por el Campeonato de España, después de que ambos lograsen un 1º Excelente:
Gala de Casa Ato, propiedad de Juan Miguel Andrés, y
Adock des Truffes Pasionnes, de Andrés Jiménez, dos magníficos bretones. Tras el barrage,
Gala de Casa Ato se alzó con la victoria y el título de campeona de España.
Y si en razas continentales el campeonato fue a parar a manos del conductor más joven, en británicos el triunfo fue precisamente para el conductor más veterano, Julián Olaya, con su magnífico pointer
Robi del Castillo de Almansa.
Robi fue campeón tras acudir a un barrage con otros tres perros, ya que todos ellos habían logrado clasificarse con un 1º Excelente.