Las jornadas, que contaron con una participación de ochenta jueces, fueron inauguradas por el Presidente de la FAC, Carlos Astorga y por Francisco Javier Cano, Presidente del Colegio de Jueces, quienes dieron la bienvenida a todos los asistentes y desearon un encuentro fructífero para el buen devenir del silvestrismo andaluz.
El principal objetivo de esta reunión fue el de unificar criterios de enjuiciamiento para todas las plumas, es decir, se trataría de conseguir que todos los jueces puntúen a los pájaros de igual manera.
El encargado de llevar a cabo la primera ponencia del programa fue el Secretario General de la FAC, José Mª Mancheño, que desarrolló algunos aspectos del reglamento disciplinario deportivo de la Federación. Durante su intervención, la polémica apareció entre los jueces cuando Mancheño comentó la posibilidad de que no se dejara participar a los jueces en las competiciones de silvestrismo organizadas en Andalucía. El tema levantó muchas protestas entre la gran mayoría de los asistentes que no comprendían el porqué de esta normativa. Se discutió mucho la cuestión que quedó definitivamente emplazada para otro momento. Al respecto, el Delegado Andaluz de Silvestrismo, Manuel Alba, comentó que
«entiendo el malestar generado porque sé que hay muchas personas que tienen pájaros y quieren participar, pero al final el tiempo nos ha dado la razón de que efectivamente esto es más perjudicial que beneficioso porque hay mucha gente que se queja de que el juez no puede ser juez y parte, por esto vamos a intentar que esta propuesta salga adelante. Yo creo que los jueces deberían ser un poco razonables y ser conscientes de este problema».
Tras el debate, el Delegado de Silvestrismo de Cádiz, Dámaso Rivero, dio lectura a las principales modificaciones que se han realizado en el reglamento de competiciones de esta modalidad. Algunas de ellas fueron debatidas por los asistentes y aclaradas por el ponente.
La tercera ponencia de la mañana fue seguida con máximo interés por todos los jueces, ya que Juan Ruíz Valverde, miembro del Colegio de Jueces y veterinario de profesión, estuvo explicando las ventajas de la implantación del chip en los pájaros. Como comentamos, la implantación del chip no está vista con muy buenos ojos por los silvestristas, sin embargo, tras la ponencia, se aclararon muchos de los conceptos y se dispersaron las dudas. Manolo Alba, comentaba que
«a la gente no le gusta el tema del chip porque al hablar de microchip parece que es más propio de otro tipo de animales, pero se ha visto que efectivamente, una vez implantado, el pájaro no siente ninguna merma y actúa exactamente igual que si no lo hubieran puesto nada. Obviamente, quien se lo ponga debe ser una persona experta. Comprendo que haya resquemor con el tema pero sé que una vez que esté implantado y la gente vea que funciona, estoy seguro de que esto va a ser muy positivo porque nos va a ayudar mucho a controlar los pájaros que se presenten a los concursos».
La segunda parte de las jornadas se dividió entre los jueces de las distintas plumas que estuvieron trabajando conjuntamente sobre los métodos de enjuiciamiento, concretando y aunando los criterios que regirán los enjuiciamientos de las aves.
