Francia

Varios cerdos atacan a una pareja de veraneantes y matan y devoran a su perro

Una pareja de sexagenarios franceses estaba veraneando en Córcega cuando varios cerdos les rodearon y atacaron. Uno de sus perros murió y fue devorado por los cochinos ante sus ojos.


 cerdos atacan a ancianos y se comen a su perro
cerdos atacan a ancianos y se comen a su perro

Todo sucedió el pasado 7 de junio, cuando dos veraneantes pasaban unos días de vacaciones en Córcega. Pero ese descanso se convirtió en pesadilla cuando se toparon con una veintena de cerdos corsos, una especie de cochinos que vive en estado de semi libertad en los campos de isla mediterránea.

Paseaban en su vehículo por la isla en busca de lugares donde realizar fotografías. Esto les llevó hasta el Col de Sevi, una zona montañosa con un precioso mirador. Allí habitan numerosos ejemplares de cerdos de la variedad corsa. Cuando los vieron, ataron a sus perros con sus correas para evitar problemas, pero esto no resultó.

Atacados por 20 cerdos

Poco después de comenzar el paseo, unos veinte cerdos les rodearon y comenzaron a atacarles. Entonces cogieron a los pequeños perros en brazos, pero los cerdos les empujaron varias veces durante sus intentos de alejarse de los animales, lo que provocaba que los ancianos cayeran al suelo. Tras una de estas caídas, los cerdos capturaron al chihuahua y lo mataron y devoraron delante de sus aterrados dueños.


Los perros que sufrieron el ataque, con el chihuahua que fue devorado por los cerdos.

Matan y devoran a su perro chihuahua

Cuando lograron ponerse a salvo, avisaron a los bomberos, que acudieron al lugar y les trasladaron al hospital, donde fueron tratados de múltiples heridas con antibióticos y les suministraron una vacuna de refuerzo contra el tétanos.

El alcalde del municipio del que depende el mirador ha manifestado que es la primera vez que sucede algo así, y adelanta que colocarán señales de advertencia y que prohíban el acceso a la zona donde están estos animales.

El cerdo corso, una raza en peligro… y peligrosa

Hablamos de una raza que solo se cría en Córcega en estado semisalvaje. Esta cría tradicional y apenas sin control del ganadero ha llevado a la raza a cruzarse con otras variedades, lo que llevó a estos cochinos, antaño de pelaje oscuro, a adquirir otras tonalidades más claras en sus mantos.

Miden unos 65 centímetros a la cruz y los machos adultos pueden alcanzar los 220 kilos de peso y longitudes de hasta 115 centímetros. Cuentan con cabezas largas y hocicos alargados. Se alimentan de lo que encuentran en los montes donde viven, y comportamientos que les llevan a devorar otros animales destapa la dependencia que estos animales han desarrollado a partir del alimento que les proporcionan los turistas.

Comparte este artículo
Autor: 
  
1807 0

Publicidad